La Fundación Bofill y la Plataforma de Infancia de Cataluña (PINCat) de la Taula de entidades del Tercer Sector Social presentaron ‘La educación vence a la pobreza‘. Se trata de una propuesta de 10 políticas educativas para romper el círculo hereditario de la pobreza desde la infancia.
El espacio del mediodía como derecho a la educación
Susagna Escardíbul, pedagoga en el área de Innovación y Contenidos de Fundesplai, puso de manifiesto la importancia del tiempo educativo del mediodía, especialmente en situaciones de vulnerabilidad.
Este espacio garantiza una alimentación adecuada y equilibrada, que para muchos niños y niñas es la única garantía. Pero el tiempo educativo del mediodía va más allá y ofrece momentos de ocio, descanso, relación con iguales, aprendizaje de valores… que favorecen la igualdad de oportunidades entre niños y niñas.
Acompañamiento y oferta formativa y laboral para la juventud
Una de las políticas presentadas se centra en poder dar respuesta a las personas jóvenes que se han desvinculado de la educación y, además, tienen dificultades para acceder al mercado laboral. En la jornada, Mariona Sala Sánchez, del área de Acción Social y Educativa de Fundesplai, y Emma Doncel Pérez, participante del Demà Jove 2, explicaron su experiencia como referente y joven participante.
Su caso muestra el vínculo tan fuerte y positivo que se genera con programas como el Demà Jove de FPO dual. Formarse y tener un contrato de trabajo fueron un impulso para Emma, que fue contratada donde realizó las prácticas como monitora. En este camino, además, contó con el acompañamiento de personas como Mariona, quien cada día trabaja con las personas jóvenes para ayudar a potenciar sus capacidades.
En la jornada también se hizo referencia a otros espacios educativos fuera de las horas lectivas, como el verano, las actividades extraescolares y la educación en la pequeña infancia. En este sentido, en 2023 otorgamos 25.595 becas y ayudas para garantizar la igualdad de oportunidades de niñas, niños y jóvenes.
Un problema que se mantiene
Según los datos recogidos, la tasa de menores en riesgo de pobreza o exclusión social de Cataluña es del 34,8% en 2024. Esta cifra, que se mantiene desde hace años, supone más de diez puntos por encima de la tasa del conjunto de la población catalana (24%). En palabras de José Antonio Ruiz, coordinador de la PINCat: “Un país como el nuestro no puede permitirse este índice de pobreza”.
En la jornada, se puso sobre la mesa la necesidad de aplicar políticas educativas que permitan generar oportunidades y romper con el ciclo de desigualdad y exclusión social. Esto, a través de 10 políticas que abordan cuestiones como el acceso a la educación desde la pequeña infancia, las ayudas y el acompañamiento a los niños, niñas y jóvenes en situaciones de riesgo, el derecho a acceder al espacio educativo del mediodía o a las actividades de verano, entre otras muchas acciones.
